Los juegos son actividades esenciales tanto para los niños como para los padres. Los niños juegan. Es muy importante para ellos poder hacerlo, porque en el juego ensayan, aprenden, prueban... Incluso está demostrado que el mejor aprendizaje es el que va acompañado de juego. El juego es, pues, una herramienta fundamental para su aprendizaje y desarrollo. A través del juego, los niños exploran su entorno, desarrollan habilidades sociales, emocionales y cognitivas, y aprenden a resolver problemas. También les brinda una forma de expresarse y liberar energía de modo saludable.

Todo puede ser un juego. Aprendamos de nuestros hijos a dedicar un tiempo importan-te al juego, a jugar con ellos, pues esto fortalece lazos de confianza, genera momentos de conexión y comunicación y es una oportunidad para modelar valores, comportamientos y habilidades importantes. Además, jugar jun-tos puede ser un modo efectivo de aliviar el estrés y crear recuerdos felices. Cuando lo que aprendemos va unido a emociones positivas, se fija más y mejor en nuestra mente. Los mejores aprendizajes de la vida merecen un poco de juego y diversión.