Colegio Nazaret Ovideo ReiniciaTe

Colegio Nazaret Oviedo

150 años "acompañándoTe"

¿Te unes?

   


Avda. de Valentín Masip, nº 31 + 34 985 23 19 00  info@colegionazaret.es 

Los exámenes (parte I)

Has terminado el tiempo de estudio dedicado a memorizar y asimilar una lección. Toca ahora demostrar lo que sabes respondiendo con competencia a lo que te pregunten en cualquiera de las posibles modalidades de evaluación.

Ya estás familiarizado con los diversos tipos de pruebas de evaluación que te pueden aplicar para comprobar tu nivel de conocimientos: controles, exámenes por escrito y oral, pruebas objetivas o de desarrollo, trabajos, exposición oral, etc. Pueden ser muchas y muy variadas. Atendemos sólo a las principales: exámenes, trabajos y exposición oral.

LOS EXÁMENES

Los exámenes siempre han tenido mala fama, pero siguen siendo el clásico y universal recurso de evaluación de conocimientos. Lo malo es que se conviertan en un fin en sí mismos y no en un medio para estimular el aprendizaje.

Planificación

No hay otro secreto ni receta para superar un examen que planificarlo y prepararlo con antelación. Los conocimientos calan como la lluvia: si llueve mucho y de golpe, sólo se aprovecha un pequeño tanto por ciento; es mejor la lluvia fina y constante que empapa la tierra.

Preparar con antelación un examen supone distribuir la materia de tal modo que la víspera sólo haya que dar un último repaso general y se pueda descansar lo suficiente para estar relajado el día de la prueba. No son recomendables las prisas ni los atracones de última hora, y mucho menos recurrir a pastillas y estimulantes para mantenerse «despiertos».

Planificar supone concretar qué va a aprenderse y cuándo, marcarse objetivos y distribuir el tiempo disponible. Si has adquirido el hábito de hacer, revisar y cumplir el horario semanalmente, no te verás sorprendido ni agobiado.

Repaso y autoevaluación

El buen estudiante no espera a que le pregunten para comprobar su aprendizaje; se pregunta a sí mismo, se autoevalúa.

La autoevaluación es una modalidad de repaso y puedes hacerla de diversos modos:

  • Cierra el libro e intenta repetir de memoria lo aprendido o escribirlo en una hoja.
  • Escribe preguntas cuando vas estudiando y respóndelas al final de la sesión de estudio sin mirar el libro.
  • Haz que te pregunten otras personas, de la familia o compañeros.

De poco sirve que estudies durante horas si no te rinde, o que creas que sabes algo si realmente no es así. Cuántas veces se oye a los estudiantes exclamar al salir de un examen: «Si me lo sabía, pero...», «Se me olvidó sólo una cosa», «Me quedé en blanco»... Expresiones que suenan a excusas y a justificación de quien no ha estudiado en condiciones.

Información

Cuantos más datos tengas sobre cómo va a ser el examen, tanto mejor. En consecuencia, sé hábil y busca pistas que te puedan orientar por dónde pueden ir las cosas.

  • Asegúrate de que sabes con exactitud la materia que entra en el examen: apartados del libro, apuntes, fechas, problemas, dibujos, ilustraciones...
  • Estate atento en los repasos que a veces se hacen en clase el día anterior al examen. Se suelen decir cosas muy interesantes sobre lo más importante y se dan pistas de lo que puede caer o no.
  • Repasa tus notas de clase y apuntes, asegúrate de que sabes cuáles son los puntos esenciales del tema, en lo que se ha insistido en clase, en las palabras clave...
  • Consulta al profesor o a los compañeros de clase las cuestiones que no has comprendido; no dejes lagunas en tu aprendizaje.
  • Pregunta al profesor, si no lo ha dicho, sobre el tipo de prueba que hará: test, temas, preguntas cortas... Infórmate también por compañeros de cursos anteriores sobre qué y cómo suele preguntar el profesor en cuestión.
  • Repasa exámenes anteriores sobre la misma materia y con el mismo profesor. Te hará caer en la cuenta de errores cometidos, de la forma de corregir, del estilo de preguntas y otros detalles.

El día anterior

El día anterior a un examen es muy importante. Los malos estudiantes lo emplean en sesiones maratonianas de última hora y en acumular más fatiga que conocimientos. Si eres una persona previsora, actuarás de otra manera:

  • Materiales. Prepara con cuidado, la noche anterior al examen, todo el material que vas a necesitar. No pocos estudiantes acuden sin bolígrafo, papel, calculadora, un documento o algo que se ha advertido que era obligatorio llevar.
  • Confianza. Preséntate confiado a los exámenes. Si has estudiado y asistido a clase, no debes tener excesivas preocupaciones. No te minusvalores y ten hacia ti una actitud positiva, optimista. Si te infravaloras y piensas que vas a suspender, bajará tu rendimiento y aumentará tu nerviosismo. Intenta ver el examen como una recompensa a tu esfuerzo y el final de una etapa pequeña o grande.
  • Ejercicio físico. Hacer ejercicio físico moderado o alguna actividad social tranquila el día anterior te ayudará a ir relajado al examen.
  • Descanso. Después de repasar, conviene relajarse, ocupar la cabeza con otra cosa y acostarse temprano para estar despejado al día siguiente.
  • Alimentación. No vayas al examen con el estómago vacío, al menos toma un pequeño aperitivo a base de fruta o vegetales (zumos...); no abuses de los alimentos con alto contenido en azúcar.

 

 

FUENTE: LIBRO TÉCNICAS DE ESTUDIO PARA ADOLESCENTES DE ANTONIO GONZÁLEZ

NUESTRAS REDES SOCIALES

   

Contacto

 

Avda. de Valentín Masip, nº 31

33013 - OVIEDO

Tfno.: 985 23 19 00 - Fax.: 985 27 07 19

Contacto: info@colegionazaret.es

Cómo llegar. Ver mapa

Education - This is a contributing Drupal Theme
Design by WeebPal.